"No matter what they take from me...they can't take away my dignity" (George Benson, The greatest love of all)

Siempre pense que el dia que dejaria la casa paterna seria el dia en que me casara; ya con 30 años encima, una relacion de seis años rota y ningun prospecto de novio a la vista desde entonces, tuve que tomar la situacion en mis manos: si seguia esperando casarme para salir de ahi, quizas no me hubiese movido jamas.

Firmar el contrato de arriendo sola y recibir las llaves de mi primer departamento de adulta, se sintio como una condecoracion, fue un momento que nunca imagine en mi vida...o mejor dicho, si lo habia imaginado, pero de una forma muy diferente:

En lugar de una maravilloso vestido como de princesa en color marfil, llevaba sandalias de taco alto, jeans ajustados y un top floreado de satin; tampoco llevaba un pulcro peinado ni un maquillaje impecable, sino mi caracteristica melena aleonada y toneladas de bloqueador solar en el rostro; y la parte mas triste quizas: no entre en los brazos de un hombre que me amara, sino que lo hice caminando y completamente sola; De todos modos, al recibir las llaves pense que este es un reconocimiento por ser una soltera independiente.

No se con exactitud que tan independiente puedo ser: No tengo idea de como si quiera conectar un cilindro de gas a la correspondiente valvula; tampoco se destapar una cañeria, ni como hacer instalaciones electricas...lo mas vergonzoso aun, es que ni siquiera tengo fuerzas como para mover muebles. Ni hablar de cuanto sufro cuando tengo que cargar las bolsas del supermercado, o cuando me siento enferma y nadie puede si quiera acercarme una taza de te caliente. Definitivamente me siento patetica, no quiero ni debo necesitar de un hombre.

Pero con urgencia necesito hacer unas instalaciones electricas o morire incinerada y sola ahi dentro. Tal vez si hay un hombre a quien pueda recurrir en este caso, un hombre con el cual siempre tuve diferencias, pero que pese a esto, ante el no me da miedo sentirme vulnerable porque varias veces me tomo en sus brazos y me levanto de caidas a pesar de que peleabamos mucho, quizas el hombre mas importante en la vida de toda mujer: PADRE...esta vez, tambien podria socorrerme.